LA PALABRA

Ella está en todos lados: en el trabajo, en las casas, abres la puerta del mundo y ellas te invaden por todos lados, en la radio, televisión, Internet, etc. Dios constituyó el universo con ellas, dijo:"Sea la luz", y fue hecha y así todas las cosas la creó por las palabras.

"Las palabras tienen poder", dan vida o dan muerte, edifican o destruyen, pueden herir o pueden sanar, animan o desalientan, provocan rencillas o traen paz.
Hubo una mujer en la Biblia que por sus palabras aplaco la ira del rey David, que iba a exterminar a todo un pueblo en el libro de 1° Samuel Cap. 25:24. Es por eso que como sabemos,  mujeres, tenemos que cuidar nuestras palabras.

En la actualidad hay muchos matrimonios destruidos porque se utiliza esta arma poderosa, para lanzar palabras amargas, como por ejemplo "Sos un inútil", "No servís para nada", "Sos tonta", "Bruta", etc. 

Palabras que van cavando hondo en los corazones, y poco a poco se van produciendo heridas tan hondas que lo que mejor pareciera es terminar el matrimonio. Como nosotras les hablemos a nuestros hijos, ellos les hablarán a los suyos. Hay hijos que sienten que no sirven para nada, tienen la autoestima muy baja porque les hablamos  mal, los maltratamos con nuestras palabras muchas veces, y sin darnos cuenta, hacemos un gran  mal.

Es por ello que debemos considerar cuales sean las palabras que salen de nuestras bocas.

La palabra de Dios es viva, es eficaz y más cortante que espada de doble filo, que penetra hasta partir el alma, las coyunturas y los tuétanos... Hebreos 4:12

Toda palabra de Dios que declaremos da vida. Aprendamos a bendecir a nuestra familia con la palabra del Señor, declaremos las promesas de Dios sobre nuestros seres queridos, Dios es fiel a sus promesas.

Como dice el libro de Efesios en el Cap.4:29, "Ninguna palabra corrompida salga de nuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes".

"La muerte y la vida están en poder de la lengua" Proverbios 18:21

"La lengua apacible, es árbol de vida, más la perseverancia de ella es quebrantamiento de espíritu" Proverbios 15:4

Antes decía "no puedo". Hoy digo, y te animo también a que puedas decirlo conmigo:

TODO LO PUEDO EN CRISTO QUE ME FORTALECE

Por Norma G de Chiapello